El abogado Félix Portes dijo que las declaraciones ofrecidas ayer por el imputado en el caso Coral, Raúl Alejandro Girón, “no son pruebas”, sino que pueden llevar a ellas.
Al ser contactado por el programa radial el Sol de la Mañana (106.7 FM), el representante del también imputado en el Caso Coral, Rafael Núñez de Aza, indicó que las declaraciones ofrecidas durante el conocimiento de las medidas de coerción, a pesar de no ser pruebas como tal, pueden influir en la decisión de la jueza.
“Las declaraciones que hacen los coimputados, si bien es cierto que no son pruebas, esa información puede generar datos, que si el Ministerio Público investiga y recolecta pruebas objetivas, esas pruebas sí pueden ser valoradas”, explicó.
En ese sentido, dijo que el testimonio como tal “no puede ser una pena condenatoria”, a diferencia del sistema judicial de Estados Unidos, donde una confesión es suficiente para provocar una condena.
“Aquí las personas confiesan, pero tiene que haber elementos probatorios necesarios, las pruebas necesarias para derivar a una posible condena, no como el caso de Estados Unidos”, indicó, Portes.
Además, dijo que aún toca esperar las pruebas que puede haber recolectado el Ministerio Público durante los allanamientos “y no nos podemos adelantar a qué exactamente el Ministerio Público encontró”.
Sobre esto, dijo que las pruebas que haya recopilado a través de los allanamiento, recién podría presentarlas y utilizarlas cuando se presente una acusación formal y se proceda a juicio de fondo.
“Ya el Ministerio Público, para esta etapa, no puede aportar más pruebas de las que haya presentado el lunes 26 de abril”, comentó durante su participación en el espacio radial.
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