CIUDAD DEL VATICANO, Roma.-El Papa Francisco recordó al poeta italiano Dante Alighieri, autor de la “Divina Comedia”, con motivo de las celebraciones por el 7º centenario de su muerte.
El Santo Padre recibió en la mañana de este sábado 10 de octubre en el Vaticano a la delegación de la Archidiócesis italiana de Ravenna-Cervia que se está encargando de organizar los actos conmemorativos del centenario.
El Pontífice señaló que desea que “las celebraciones del 7º centenario de la muerte del gran poeta estimulen una revisita a su Divina Comedia para que, conscientes de nuestra condición de exiliados, nos dejemos provocar por el camino de conversión, ‘del desorden a la sabiduría, del pecado a la santidad, de la miseria a la felicidad, de la contemplación terrorífica del infierno al beatífico paraíso’”.
“Dante”, subrayó el Papa, “nos invita a reencontrar el sentido perdido y oscurecido de nuestro recorrido humano”. Al reflexionar sobre la aportación de Dante a la cultura y civilización europea y cristiana, reflejada en la Divina Comedia.
Francisco señaló que “podría pareceR que en estos siete siglos hemos excavado una distancia inabarcable entre nosotros, hombres y mujeres, de la época postmoderna y secularizada, y él, extraordinario exponente de una edad dorada de la civilización europea”.
“Y sin embargo hay algo que nos dice que no es así. Los adolescentes, por ejemplo, también los de hoy, tienen la posibilidad de acercarse a la poesía de Dante de una manera accesible para ellos”. Por un lado, “encuentran inevitablemente toda la lejanía del autor y de su mundo. Pero, por el otro lado, advierten una sorprendente resonancia”.
“Podremos enriquecernos con la experiencia de Dante para atravesar las muchas selvas oscuras de nuestra tierra y cumplir felizmente nuestro peregrinaje en la historia para llegar a la meta soñada y deseada por cada hombre”, concluyó el Papa Francisco.
La Divina Comedia es la obra cumbre de Dante Alighieri. Tiene tres partes: Infierno, Purgatorio y Paraíso. Está dividida en cantos, la primera parte fue organizada en treinta y cuatro cantos y las dos restantes en treinta y tres.
Cada canto fue compuesto por estrofas de tres versos endecasílabos. El Infierno está dividido en nueve círculos, el Purgatorio en siete y el Paraíso queda formado por nueve esferas que giran como los planetas en torno al sol.
(FUENTE: ACIPRENSA)
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