Oficiales de la Policía Nacional buscan a los dos asaltantes que mataron un niño de tres años en el sector Valiente, de La Caleta, en Boca Chica.
Los agentes de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrin) y otros departamentos de la Dirección Regional Santo Domingo Oriental de la Policía efectuaron requisas en lugares vulnerables de los sectores Valiente, La Caleta y Campo Lindo, Boca Chica, detrás de los antisociales que provocaron la muerte del infante Ransel Ariza de los Santos.
El coronel Grullón Colado informó que durante los operativos se requisaron casuchas abandonadas e intervinieron varios puntos de venta y distribución de drogas narcóticas.
En uno de esos puntos, que se dijo era propiedad de un tal “Eddy”, se encontró un bulto de color negro, conteniendo en su interior varias porciones de un vegetal verde, presumiblemente marihuana, y dos de un material rocoso, que se presume es crack, así como una balanza y varios recortes de papel plástico.
En otro punto de drogas, ubicado en un callejón del barrio Las Piedras, del sector Valiente, fue apresado Kawandy Vélez con 33 porciones de marihuana.
No están seguros
La Policía Nacional informó que aún no tiene certeza de la participación de Maycol Bautista en el asesinato del niño Ransel Ariza de los Santos ocurrida en el referido sector.
Bautista se entregó acompañado de comunitarios, en la Unidad de Investigación de homicidios de la Policía en Boca Chica, porque era perseguido por el crimen.
No obstante, la institución explicó que aún no tiene pruebas suficientes que lo impliquen en el hecho y que sigue las investigaciones.
“Hay una persona detenida, otra que se presume participó y se está trabajando en la búsqueda de ese individuo. Todas las personas que han salido a relucir durante las investigaciones han sido requeridas y hay que esperar a ver su grado de responsabilidad para proceder”, dijo el vocero de la Policía, Frank Féliz Durán Mejía, el pasado.
Como ocurriendo los hechos
Ransel Ariza de los Santos, quien había cumplido el pasado día 10 tres años de edad, fue alcanzado por una bala cuando se encontraba sentado en su pequeña silla azul tomando leche junto a su madre, frente a su residencia, ubicada en la calle 21 del referido sector.
“Ellos nos quitaron los celulares y nos amenazaron con una pistola para que no gritemos, luego ellos se dirigieron hacia la casa de Ransel, donde un grupo de personas compartía, y ahí fue cuando le advertí a mi hermano que eran atracadores”, dijo.
“En ese momento ellos intentaron repelerlos, pero estos realizaron tres disparos para poder escapar, impactando al pequeño”, narró Santa Paniagua, víctima de los delincuentes.
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