Santo Domingo.- Hatianos que residen en República Dominicana ven con preocupación la crisis política y económica en la que está inmersa su país de origen, dónde las violentas protestas contra el Gobierno del presidente Jovenel Moise se intensifican.
Alguno entienden que las manifestaciones no van a resolver nada y que lo mejor vía es el diálogo, pero otros están a favor del que el pueblo reclame sus derechos.
La situación de Haití se agravó este año por una fuerte depreciación del gourde y por la crisis de electricidad derivada de la escasez de gasolina
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