La Conferencia del Episcopado opinó que los legisladores
tienen el reto y el desafío de romper la prolongada espera y asumir la
responsabilidad de aprobar una ley de partidos que ponga fin al dispendio de
recursos públicos y contribuya a eliminar las prácticas corruptas del
enriquecimiento ilícito.
En un comunicado firmado por todos los obispos, la Iglesia
Católica entiende que la dirigencia política y los legisladores deben anteponer
sus intereses particulares y pensar en los intereses de la Patria.
A continuación el texto de la Conferencia del Episcopado
sobre el tema:
“Como pastores que escuchamos las voces de muchas personas
que se nos han acercado, para que, ante el proceso de la aprobación de la Ley
de Partidos Políticos y la propuesta de reforma a la Ley Electoral, demos
nuestro parecer sobre estas normas que han de reglamentar el funcionamiento de
los Partidos y de la Junta Central Electoral, y que es un reclamo que se
encuentra en la agenda del Congreso Nacional desde hace años.
El tema de las elecciones, ha sido una preocupación
constante de parte de los Obispos católicos de la República Dominicana; una
vez que el ejercicio del sufragio aparece en nuestra Constitución como un
derecho de ciudadanía y un deber (arts. 208, 22.1 y 75.2 de la Constitución
Dominicana), así como una manifestación de la expresión más excelsa de la
soberanía popular junto al respeto de la dignidad humana, la libertad y el
Estado de Derecho.
En el año 2016, la Conferencia del Episcopado Dominicano
expresaba: “Por otra parte pedimos encarecidamente y sugerimos que, pasadas las
elecciones del presente año, el Congreso se esfuerce con sinceridad, con
seriedad y responsabilidad a elaborar y aprobar la Ley de Partidos Políticos
para una mayor transparencia y ordenamiento en el quehacer político y para el
fortalecimiento de nuestra democracia” (Mensaje del 27 de febrero “Próximas
Elecciones y Otras Urgencias”, numeral 14). Esta democracia, que tanto ha
costado al país conquistar, sostener y hacer crecer, ha de motivar a que cada
partido esté en la libertad de escoger la modalidad de elecciones internas que
considere conveniente.
De igual manera, el pasado 27 de febrero 2018, hablando
acerca del valor de la paz reiteramos que: “perturba el ambiente de paz en
nuestra Nación, la falta de una Ley de Partidos que garantice la
transparencia, el control y el uso de los recursos estatales, la participación
de la mujer y la representatividad de sectores excluidos en las contiendas
electorales entre otros. ―Y expresamos― Estos son males y realidades que nos
arrebatan la paz”. (Mensaje “La impostergable urgencia de vivir en valores”).
En cuanto a la Junta Central Electoral, recordamos como ya
dijimos en el numeral 7 del Mensaje: “Por favor digan algo”, del 26 de enero
del 2004: “Es un deber suyo disipar toda clase de dudas a base de integridad,
transparencia, eficiencia, eficacia y responsabilidad”.
Entendemos que no se puede forzar a la Junta Central
Electoral, a la que todos debemos dar nuestro voto de confianza, para que tenga
que llevar a cabo tantas elecciones en un mismo año o en unos pocos meses
sucesivos.
Nos preguntamos qué hacer frente a esta situación, y por
ello consideramos pertinente algunas sugerencias.
En primer lugar, sobre la Ley de Partidos Políticos que ha
sido tan esperada por la sociedad y dejada durante más de una década fuera de
la agenda del Congreso, siempre anunciada más siempre postergada; esta es la
oportunidad de su aprobación, no la desaprovechemos.
Entendemos que nuestros legisladores tienen el reto y el
desafío de romper esa prolongada espera y asumir la responsabilidad con el
criterio consensuado por todos y cada uno de ellos, y que responda a los
principios democráticos del ejercicio partidario.
En segundo, lugar sería la aprobación de una Ley de
Campaña Electoral, esperando que “le ponga fin al dispendio de recursos en la
vida política partidista y que paute el financiamiento y los tiempos de las
campañas proselitistas”. (Mensaje “50 años de elecciones democráticas y
otras cuestiones”, del 27 de febrero 2012, numeral 34). El documento del 2012
pone la mirada en el fortalecimiento de la democracia donde líderes políticos
abran el horizonte de la participación a nuevas estructuras emergentes y al
liderazgo renovado.
En tercer lugar, aspiramos a que desaparezcan radicalmente las
prácticas corruptas del enriquecimiento ilícito, a través del ejercicio de
la política, buscando equidad en el gasto, en el uso de los medios de
comunicación, así como en la inversión legal de los recursos del Estado y la
administración de encuestas científicas y comprobadas fuera de toda
manipulación.
En cuarto lugar, invitamos a que nuestras campañas
políticas favorezcan el debate de los candidatos, a fin de que se reduzca el
tiempo de campaña, y que la población sea debidamente edificada respecto a la
oferta programática de cada partido y candidatos.
A los Partidos Políticos pedimos una vez más que
antepongan siempre el bien de la patria a sus intereses particulares. No
perdamos el horizonte del bien común. La Nación espera de ustedes, no el
estrépito de sus luchas internas sino una búsqueda aunada y firme de
soluciones a los problemas que nos agobian y que podrían perturbar la paz de
todos los dominicanos”.
Santo Domingo, 16 de mayo del año 2018. Les bendicen,
- Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez, Arzobispo
emérito de Santo Domingo
- Diómedes Espinal De León, Obispo de Mao-Montecristi, Presidente
de la Conferencia del Episcopado Dominicano
-
Héctor Rafael Rodríguez Rodríguez, M.S.C., Obispo de La
Vega Vicepresidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano
- Francisco Ozoria Acosta, Arzobispo Metropolitano de Santo
Domingo, Primado de América
- Freddy Antonio de Jesús Bretón Martínez, Arzobispo
Metropolitano de Santiago de los Caballeros
- José Dolores Grullón Estrella, Obispo de San Juan de la
Maguana
- Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, Obispo de Nuestra
Señora de La Altagracia, Higüey
- Julio César Corniel Amaro, Obispo de Puerto Plata
-Fausto Ramón Mejía Vallejo, Obispo de San Francisco de
Macorís
- Andrés Napoleón Romero Cárdenas, Obispo de Barahona
- Víctor Emilio Masalles Perez,Obispo de Baní
-Santiago Rodríguez Rodríguez,Obispo de San Pedro de
Macorís
-Carlos Tomás Morel Diplán, Obispo Auxiliar de Santiago de
los Caballeros
-Ramón Benito Ángeles Fernández, Obispo Auxiliar de Santo
Domingo
Secretario General de la Conferencia del Episcopado
Dominicano
-Jesús Castro Marte, Obispo Auxiliar de Santo Domingo
-Faustino Burgos Brisman, C. M., Obispo Auxiliar de Santo
Domingo
-Ramón Benito De La Rosa y Carpio, Arzobispo emérito de
Santiago de los Caballeros
-Fabio Mamerto Rivas Santos, S.D.B., Obispo emérito de
Barahona
-Jesús María De Jesús Moya, Obispo emérito de San
Francisco de Macorís
-Antonio Camilo González, Obispo emérito de La Vega
-Rafael L. Felipe Núñez, Obispo emérito de Barahona
-Pablo Cedano Cedano, Obispo Auxiliar emérito de Santo
Domingo
-Valentín Reynoso Hidalgo, M.S.C., Obispo Auxiliar emérito
de Santiago de los Caballeros
No hay comentarios
Publicar un comentario